ALTITUD: Brañacaballo o Cueto Millaro (2.182m), Alto del Sexteo (2.046m), Pico la Foya (2.017m) y Pico Pizarra (1.981m)

DISTANCIA TOTAL: 12,4 km

TIEMPO: 5h (teniendo en cuenta paradas, comida y fotos)

DESNIVEL ACUMULADO: 810m

DIFICULTAD: Algún tramo de escobas que se salva sin problemas. Según MIDE (3,2,3,3)

PUNTO DE PARTIDA: Millaró de la Tercia

MAPA DE LA RUTA:

Descripción:

Circuito sencillo en cuanto a dificultades técnicas a una de las cimas más destacadas del sector central de la Cordillera. No en vano estamos en la cima más alta entre las Ubiñas y los Mampodres.

Aparcamos el coche al final del pueblo Millaró de la Tercia en una especie de aparcamiento de tierra y cemento. La pista, ya de tierra, continúa después del aparcamiento pero por ahí regresaremos de nuestro circuito. Por tanto retrocedemos brevemente hacia al pueblo tomando la bifurcación de la derecha.

Ahora enlazamos con otro ramal que procede del mismo pueblo, el cual y poco a poco, va quedando atrás. La iglesia de San Juan Bautista y el cementerio nos saludan mientras vamos ascendiendo poco a poco por una pista de tierra sin pérdida. Alcanzamos el collado Carrozal donde dejamos a la izquierda un corral para el ganado que en época estival será fácil toparse con algún mastín.

En el collado dejamos el ramal de la izquierda y continuamos por la pista principal en ascenso. En la siguiente revuelta debemos coger el ramal de la izquierda y obviar el de la derecha. Las vistas mejoran pudiendo observar ya el macizo de las Ubiñas y el grupo del Cellón. Abajo el valle de la Tercia con la sierra de Currillos.

Después de un rato volvemos a llegar a una nueva bifurcación. Teóricamente por ambos sitios se puede subir al Brañacaballo. Nosotros optamos por girar a la derecha y coger el ramal que de no abandonarlo nos llevaría de nuevo hasta el pueblo. Pero nosotros queremos hacer cima para lo cual abandonaremos la pista en un giro de izquierdas donde nos vamos a la ladera que baja de la cima.

Este será el tramo más "complicado" del día pues habrá que sortear un poco las escobas. No obstante hay traza de senda prácticamente hasta la cima. En ella las vistas son infinitas y dependerán de la nitidez del día que pillemos.

Por supuesto todas las miradas se las lleva la Ubiña Grande y el grupo de los Fontanes.

Se puede observar tirando de zoom el embalse de casares, las Tres Marías, La Barragana, el Cirbanal,....

....el Estorbín de Valverde, el Cuadro, etc por el Oeste. Por el Este los lejanos Picos de Europa, el Torres, el Huevo, Morala, Polvoreda, Bodón e incluso la Montaña Palentina con el Espiguete al fondo del todo.

Descendemos de la cima por la cresta en dirección a las tres cumbres secundarias del día: Alto del Sexteo, Pico la Foya y el Pico Pizarra. Como telón de fondo el sector leonés de la Cordillera.

El cresteo es fácil, alternando zonas despejadas con un algún tramo sencillo de escobas. La mole del Brañacaballo va quedando atrás.

Concluida la cresta hasta el pico Pizarra nos despedimos del Brañacaballo y su séquito: la Carba y la peña Celleros. Descendemos siguiendo la alambrada y posteriormente buscando la mejor manera de evitar las escobas para alcanzar la pista que abandonamos cuando ascendimos el Brañacaballo.

Alcanzamos la pista que de forma cómoda y sin pérdida nos llevará hasta el mismo aparcamiento de la mañana.

La pista va describiendo algunas "zetas" que nos permiten ver el objetivo conquistado.

Aunque hay que decir que se hace más largo por aquí que por el camino de ida. Esto implica que la pendiente es algo más "amable". El pueblo se va asomando poco a poco dejando una bonita estampa con las Ubiñas como telón de fondo.

Finalmente la pista muere en el pueblo no sin antes dejarnos una imagen de la montaña que hemos ascendido. Muy cerca del aparcamiento destaca el peculiar puente de madera que cruza el arroyo Millaró.

AVISO: Es responsabilidad de cualquiera que realice las actividades aquí descritas el tomar las medidas de seguridad oportunas. Variables como la meteorología, la estación correspondiente, la altitud, el estado del terreno, y sobre todo la preparación física y técnica de cada uno, harán apropiadas o no la realización de dichas actividades. Los tiempos aquí descritos son meramente orientativos y corresponden exclusivamente a mi condición física. También habrá que tener en cuenta, si procediera, la legislación administrativa y ambiental del espacio donde se esté realizando la actividad ya que podría estar sujeta a ciertas restricciones. El desconocimiento de estas restricciones no exime del cumplimiento de las mismas.