ALTITUD: Pico Mocoso (1.977m)

DISTANCIA TOTAL: 20,2km

TIEMPO: 9h (teniendo en cuenta muchas paradas, comida y fotos)

DESNIVEL ACUMULADO: 1.240m

DIFICULTAD: La navegación entre la Pornacal y las Lagunas del Páramo será complicada porque el sendero está muy tapado en algunos tramos por la vegetación. Muy aconsejable seguir el track. Según MIDE (3,4,3,4)

PUNTO DE COMIENZO: Villar de Vildas

MAPA DE LA RUTA:

DESCRIPCIÓN: En medio del pintoresco y vaqueiro pueblo de Villar de Vildas hay un pequeño parking donde podemos dejar el coche. Salimos en dirección Sur recorriendo la carretera principal. Al final de esta localidad este vial se acaba convirtiendo en una pista de hormigón. Ojo que hay una señal de prohibido el paso a todos los vehículos salvo los utilizados para uso ganadero. Por tanto, cuidado si uno tiene la tentación de meter el coche por aquí y acortar la ruta.

Al fondo se observa el cordal de la Sierra de la Serrantina, todavía cubierta con algunos restos de nieve. El rio Pigüeña baja con fuerza y con bastante caudal gracias al deshielo de la primavera.

Al poco de salir la pista desciende brevemente hasta el puente de los Cotaos. A partir de aquí la pista prácticamente no da tregua hasta la braña de la Pornacal. Hoy el verde lo domina absolutamente todo. Hay agua en abundancia, buenos nutrientes y además Sol, ingredientes fundamentales para generar clorofila.

Por fin llegamos a la más famosa braña de teitos o cabañas de escoba de todo Somiedo; la Pornacal. Formada por una treintena de estas construcciones bien merece la pena una pequeña parada para recorrerlas con calma. Algunas tienen un considerable tamaño. No hay que olvidar que el brañeiro o vaqueiro de alzada subía aquí con el ganado en época estival y dormían todos aquí dentro de estos teitos.

La mayoría de los teitos se encuentran en muy buen estado gracias al cuidado de los vaqueiros. Este mantenimiento se basa principalmente en el reteitado, cada cierto tiempo, del techo. 

Abandonamos la pista hormigonada que nos ha traído hasta aquí para afrontar el tramo más complicado de toda la ruta. Giramos en dirección Este y empezamos a subir por la ladera de la Sierra del Páramo.

Al principio el sendero por el que ascendemos está bastante marcado, aunque con algunos cortos tramos más "tomados" por la vegetación. La Pornacal se nos va quedando bastante abajo y a vista de pájaro es espectacular.

Sin prácticamente ningún problema alcanzamos la Fuente de las Cárcavas, situada al lado de un notable árbol. Por su parte derecha el sendero continúa ascendiendo por sendero marcado.

Echando una mirada atrás las panorámicas de los Raxos, el Cogollu de Cebolledo, etc, son cada vez son mejores.

Sin darnos cuenta llegamos a las ruinas de la braña de las Caranganas asentada en un amplio rellano cerrado por un muro de piedra de forma circular.

Las vistas hacia las Peñas de Nuncio, Canseco y el Cornón de Somiedo son excelentes. Hasta esta posición apenas habremos "luchado" con las escobas. A partir de aquí el sendero, bastante perceptible por el que hemos transitado, desaparece casi por completo. Las escobas lo han "tomado" en buena medida y habrá que luchar con ellas.

Salimos de la braña de las Caranganas por una tenue traza al principio, intentando buscar siempre las zonas más limpias. Alcanzamos de nuevo un pequeño rellano, cruzamos las escobas y llegamos a un pedrero.Lo aprovechamos y progresamos por el hasta al final ya que será la forma más sencilla de librarnos de la vegetación.

Tras pasar el pedrero comenzamos a subir por una zona despejada y herbosa, bastante limpia, que saldrá finalmente a la laguna Redonda. Es muy recomendable usar el track desde la Pornacal hasta este punto ya que nos va a servir de mucha ayuda y nos evitará perdernos entre las escobas, algunas de bastante altura.

Giramos a nuestra izquierda, dirección Noroeste, para alcanzar en poco tiempo las dos siguientes lagunas: Llamazu y la Cabreiro, que es la más grande todas. Ojo que en el track queda un pequeño trazo hasta a ellas. No obstante lo que resta es fácil.

La foto de la laguna Cabreiro con el Cogollu de Cebolledo, Cogollu, Cabril y Fanarrionda es espectacular. Volvemos por nuestro pasos de nuevo hasta la laguna Redonda.

Continuamos en suave ascenso por este sendero, dirección Sur, deleitándonos con las vistas hacia el valle del Pigüeña. Pronto alcanzaremos otras dos nuevas lagunas.

La primera de ellas apenas es una pequeña charca sin nombre, que sucumbirá a los rigores del calor en el verano. La segunda es la laguna Chamazo y tiene mayores dimensiones. Desde aquí ya divisamos el objetivo final que es la cumbre del Pico Mocoso.

Dejamos atrás la laguna Chamazo y en poco tiempo alcanzamos la última laguna de la sierra del Páramo que es la laguna Seca, que esta ocasión no hace honor a su nombre.

Dejamos atrás definitivamente las lagunas del Páramo y encaramos la subida al Mocoso por la cuerda del pico Cogocha. No hace falta alcanzar la cima de este último, por lo que podemos flanquearlo a media ladera por su cara Norte. Podemos también divisar el Puerto de Cereizales que hace de divisoria entre el Parque Natural de Somiedo y Laciana, ya en la provincia de León.

Las vistas hacia la cara Norte del Mocoso son impresionantes.

Alcanzamos de nuevo la cuerda que en pocos minutos nos dejará en la cima de esta cumbre, muy cerca de los 2.000m de altitud.

Desde la cima destaca sobremanera, al Oeste, la cima del Cornón de Peñarrubia que es el techo de Somiedo, y al otro lado, al Este, las Ubiñas y Peña Orníz.

Descendemos por la cara Sur del Mocoso, buscando zonas despejadas de escobas, para ganar la pista que viene del pueblo de La Peral. Giramos a la derecha en dirección a la fuente de las Machadas. Una vez aquí la pista se convierte en un sendero.

Continuamos hasta el collado de la Enfestiella. En ese lugar giramos a la derecha, dirección Norte, descendiendo hacia el valle del Pigüeña. Desde aquí las vistas son magníficas y el camino se vuelve relativamente cómodo. El sendero está muy marcado y libre de vegetación.

A pesar de que vamos descendiendo las vistas al valle no empeoran. Divisamos la pista por la que hemos subido esta mañana y que nos volverá a llevar hasta el punto de partida; el pueblo de Villar de Vildas.

La sierra del Páramo queda a nuestra derecha como una auténtica muralla. Al llegar al final del descenso tenemos la opción de desviarnos a la izquierda en dirección a la braña Viecha o de los Cuartos. Nosotros obviamos esta opción y ganamos directamente la pista, quedando las Peñas del Nuncio a nuestras espaldas.

Pero todavía quedan cosas bonitas por ver como por ejemplo la cascada del Corralón. En época de lluvias o deshielo en primavera, como es nuestro caso, la cascada es espectacular.

Después de varias fotos continuamos el descenso ahora ya por la pista hormigonada que nos llevará sin pérdida de nuevo a la Pornacal. Aunque ya estuvimos por la mañana la parada es, de nuevo, obligada.

Recorremos con tranquilidad la braña y sus teitos. Venir solo hasta aquí desde Villar de Vildas ya merece mucho la pena.

Nos despedimos con pena de este fantástico lugar, donde bien parece que el tiempo se ha detenido. El tiempo se ha cubierto de la típica bruma asturiana vespertina y cuando nos demos cuenta ya habremos llegado a Villar de Vildas.

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