ALTITUD: Peña Negra (1.833m)
DISTANCIA TOTAL: 18km
TIEMPO: 7h30 (teniendo en cuenta muchas paradas, comida y fotos)
DESNIVEL ACUMULADO: 1.130m
DIFICULTAD: Ninguna. Según MIDE (3,3,3,4)
PUNTO DE COMIENZO: Arbellales (Area recreativa)
MAPA DE LA RUTA:
DESCRIPCIÓN: una de las características más destacada del Parque Natural de Somiedo es su arquitectura. Estamos hablando de los teitos, que son construcciones de piedra con un tejado formado por un entramado de madera y cubierto de un techo vegetal, normalmente de escobas. Es un edificio muy popular en esta zona de Asturias, en el Bierzo de León y Ancares. En la zona de Galicia la denominación es palloza. Estos edificios se usaban para resguardo del ganado y del pastor (vaqueiros de alzada) cuando estos últimos subían "alzaban" con el ganado a los puertos en época estival. Si te gusta este tipo de construcciones, como es mi caso, esta ruta está especialmente aconsejada. Atravesaremos y observaremos unos cuantos a lo largo del día, al cual más bonito.
Dejamos el coche en las inmediaciones del pueblo de Arbellales, aprovechando el área recreativa. Atravesamos el pueblo y al final del mismo encontramos un lavadero y un molino. Entramos en la Foz de la Güergola.
Atravesamos esta "garganta" encajonada entre grandes paredes de roca caliza por el que discurre el arroyo de Murias. En ocasiones el camino se convierte en una escalera de piedra natural por el que ganamos rápidamente altura. Es un pasaje muy bonito por el que volveremos al final de la ruta.
Al final de la Foz el camino se bifurca, el ramal de la derecha asciende hasta la Braña de Ordiales de Arbeyales por el que regresaremos de nuevo hasta aquí. Pero obviamos este ramal y giramos a la izquierda para continuar ascendiendo.
LLegamos así a la primera de las muchas Brañas que recorreremos en el día de hoy. En esta ocasión se trata de la Braña Murias desde donde ya se empiezan a vislumbrar las altas cumbres de este paisaje llamado Somiedo.
También apreciamos hacia al Norte, y ahí arriba, la ascensión del día: Peña Negra. En esta ocasión, y haciendo honor a su nombre, observamos como su ladera Sur está parcialmente quemada por un reciente incendio.
Dejamos la braña a nuestra derecha y seguimos ascendiendo por un marcado sendero que gira a la derecha buscando entre las escobas la siguiente parada. Alcanzamos la Braña de la Corra, que para mí es una de las más bonitas de Somiedo.
En este momento enlazamos con el Camín Real de la Mesa, que proviene del Alto de San Lorenzo y que acaba en Torrestío, ya en tierras de León. Su principal cometido era comunicar Castilla con la salida hacia el mar.
Volviendo a la braña comentar que en ella se concentra un buen puñado de teitos en estado de conservación muy bueno. Las panorámicas empiezan a ser mucho mejores. A lo lejos vemos el gigante de la zona, el Cornón de Peñarrubia, que aun conserva nieve en su cima. También vemos mucho más cerca la Peña el Michu, con restos del incendio anteriormente comentado.
Salimos de la braña y seguimos por el Camín Real de la Mesa. Nos encontramos enseguida con una fuente, punto donde abandonamos el Camin, y del que sale un sendero marcado que nos llevará directamente a la cima de Peña Negra. En los últimos metros hay que ayudarse un poco con las manos y se hace un poco aéreo pero sin mayor problema.
La cima es algo reducida coronada por una cruz. Las vistas son increíbles hacia el valle de Teverga, la Sierra del Aramo, las Ubiñas y en general todo el Parque de Somiedo.
Podéis bajar por el mismo sitio o acortar un poco por algún sendero, como fue mi caso. Nos situamos en el Camín Real de la Mesa nuevamente, el cual no lo dejaremos hasta el Collado de la Magdalena. Abajo queda, muy lejos, el pueblo de Arbellales y la Foz por la que hemos subido esta mañana. Al fondo el majestuoso Cornón de Peñarrubia.
Seguimos por este camino el cual es muy cómodo de transitar. Pasamos por debajo de Peña Negra y observamos por de debajo de nosotros la Braña de Ordiales, con la mayoría de sus construcciones totalmente derruidas.
Peña Negra en algunos momentos muestra su cara más alpina. Estamos en las inmediaciones del Collado Sedernia.
El valle de Saliencia es espectacular se mire por donde se mire y tenemos la suerte de observarlo por este camino a vista de pájaro. Vemos también parte de la pista por la que regresaremos de nuevo al pueblo de Arbellales.
El Camín Real de la Mesa está muy bien marcado, no solo porque es un camino ancho, sino porque cuenta con algunos monolitos de piedra pintados con las marcas del GR-101.
Llegamos al Collado de la Magdalena. Abandonamos el Camín que se dirige a Torrestío y giramos a la derecha por la pista que se dirige al pueblo de Saliencia. Si te has quedado con las ganas de ver más teitos a partir de aquí no te va a defraudar lo que resta.
Bajamos por la pista, desde el Collado de la Magdalena, y nos encontramos directamente con las Morteras de Saliencia con numerosos teitos en muy buen estado en general.
El paisaje es una delicia y las paradas son obligatorias para inspeccionar un poco este tipo de construcciones. Aunque tampoco hay que quitarle el ojo al valle que nos viene acompañando todo el día. La pista sigue descendiendo y muy cerca de Saliencia se bifurca.
El ramal de la izquierda nos dejaría en el pueblo. Pero nosotros seguimos por la derecha en busca de más brañas.
Atravesamos las Morteras de Ordiales y el paisaje que se dibuja con la Sierra de los Bígaros es espectacular. Aunque el cansancio aparece seguimos disfrutando de estas maravillosas vistas.
A cada paso que damos aparece una nueva postal. Seguido llegamos la Braña del Rebollar o Braña el Cutchao. En este caso nos encontramos con algún teito un tanto maltrecho y al que le falta algo de mantenimiento. Pero aún así le da un toque al paisaje.
Si nos acercamos un poco al borde contemplaremos la vista más increíble, tal vez, del día. El valle de Saliencia al completo, con las poblaciones de Éndriga y Saliencia culminando en el Alto de la Farrapona, al fondo. Este puerto de alta montaña, con más de 1.700m de altura, se ha convertido en uno de los finales míticos de la Vuelta ciclista a España. Es un auténtico valle de origen glaciar en forma de "U". Creo que la foto dice más que mil palabras para describir la belleza de este lugar.
Los teitos siguen apareciendo salpicando el paisaje de forma espectacular. Algunos son especialmente bonitos por sus dimensiones, por el buen estado que tienen y especialmente por el colorido de la piedra.
Ya estamos terminando nuestro camino por las brañas de Saliencia y no nos podemos olvidar de la montaña que hemos ascendido hoy. Aparece de nuevo con su cara más rocosa.
Por fin llegamos a la última braña del día, la de Ordiales de Éndriga. Han sido muchas las que hemos visto y cuesta decidir cual ha sido la más bonita de todas.
En este punto debemos abandonar la pista que conduce de nuevo a la Braña de Murias, la primera que vimos esta mañana. Giramos a la izquierda descendiendo por la hierba para encontrar, sin mucha dificultad, el sendero que nos llevará de nuevo a la Foz de la Güergola.
Desde aquí hasta el coche es terreno conocido por lo que no habrá ningún problema en alcanzarlo. Ruta excepcional por uno de los entornos más bonitos de Somiedo.
AVISO: Es responsabilidad de cualquiera que realice las actividades aquí descritas el tomar las medidas de seguridad oportunas. Variables como la meteorología, la estación correspondiente, la altitud, el estado del terreno, y sobre todo la preparación física y técnica de cada uno, harán apropiadas o no la realización de dichas actividades. Los tiempos aquí descritos son meramente orientativos y corresponden exclusivamente a mi condición física. También habrá que tener en cuenta, si procediera, la legislación administrativa y ambiental del espacio donde se esté realizando la actividad ya que podría estar sujeta a ciertas restricciones. El desconocimiento de estas restricciones no exime del cumplimiento de las mismas.