ALTITUD:  Pico Nevadín (2.077m) y Miro de Rabón (1.958m)

DISTANCIA TOTAL: 17,3km

TIEMPO: 8h45 (teniendo en cuenta muchas paradas y fotos)

DESNIVEL ACUMULADO: 1.150m

DIFICULTAD: No hay grandes dificultades a excepción de la longitud y el desnivel. Tan solo puede ser complicado dar con la bajada por el bosque tras la Braña de Cubacho. Según MIDE (3,3,3,4).

PUNTO DE COMIENZO: Rabanal de Arriba

MAPA DE LA RUTA:

DESCRIPCIÓN: Aparcamos el coche en el pueblo de Rabanal de Arriba. Ciertamente no hay muchos huecos disponibles pero en el centro del mismo, al lado de la fuente, podremos dejarlo. Caminamos hacia el Suroeste por la estrecha carretera del pueblo pasando por la Fuente La Pila. La carretera se convierte en una pista que se adentra en el bosque. Dejaremos a nuestra derecha el pueblo de Rabanal de Abajo y una vista parcial del embalse de las Rozas.

Hacia adelante observamos las montañas tapizadas de un espectacular y frondoso bosque. Dejaremos la bajada hacia la derecha a las cascadas del Pimpanón para la vuelta. Después de un rato llegamos a una bifurcación sobre la cual pivotará nuestra circular. En este punto hay una serie de molinos de agua junto a unos cuantos puentes que cruzan los arroyos Cubachín y la Brañina.

Elegimos el camino de la derecha, hacia la Brañina, para regresar por el de la izquierda a la vuelta. El camino se va estrechando y sube con fuerza por un fantástico bosque.

Al llegar a la Brañina, un lugar que ahora está desolado, nos retrotrae al pasado cuando esta braña estaba a pleno rendimiento. El Cornón de Somiedo asoma al fondo.

Dejamos atrás la braña y seguimos ascendiendo con fuerza por una amplia campera. Nos topamos con algunas manadas de caballos pastando mansamente. Las montañas de Somiedo nos siguen al fondo.

Llegamos al collado Trasmundo. Tenemos que seguir por toda la cuerda por la que, sin pérdida, alcanzaremos la primera cima del día. Al fondo vemos la pista por la que hemos ido transitando.

Se van ampliando las vistas conforme vamos ganando altura. Desde el Cueto Nidio, en primer plano, hasta las montañas de Somiedo pasando por las del macizo de Ubiña, como los Fontanes, la Ubiña Grande y la Pequeña.

Alcanzamos la cima del Miro de Rabón, con Villablino y el embalse de las Rozas. Hacia el Norte destaca el Cuetu Arbás, el Cornón de Peñarrubia y el Muxivén.

Descendemos de la cima dirección al Nevadín. Alcanzamos el collado Boqueta de Fuentefría. 

Hacia el Sur las altas cimas del Bierzo como el Valdeiglesias, Catoute y el Lago.

Atrás va quedando el Miro de Rabón. Por delante la Peña Vendimia nos va anunciando que el Nevadín está bastante cerca.

Hacemos cima en el Nevadín. Las vistas muy parecidas a la cima anterior. Haciendo zoom podemos ver Peña Cefera, Arcos de Agua, la Peñona y el Tambarón.

El Miro de Tejedo y al fondo el Cuetu Arbás. Al fondo, por donde bajaremos, ya vemos las lagunas del Chagunón. El Cornón y el Muxivén hacia el Norte.

Descendiendo por la cara Norte del Nevadín, ya vemos las lagunas del Chagunón con el Cuetu Arbás al fondo.

Espectacular esta cara Norte de la montaña junto con las lagunas.

En las inmediaciones de las lagunas hay algún chozo derruido. Descendemos por una senda algo difusa llegando a la majada de la Culebra.

Dejando atrás la majada nos adentramos en un bosque. Pasamos por unas buenas praderías cercadas por unos muros de piedra y alcanzamos una pista que ya no abandonaremos hasta la braña de Cubacho.

Retrocediendo de nuevo a la pista principal dejamos un primer cruce a la derecha y seguidamente dejamos la pista. A mano izquierda y de forma poco perceptible arranca un sendero, que más adelante se hace más evidente. Este es el punto clave para descender por el bosque.

Es una preciosa senda que discurre parelela al arroyo de Cubachín y por un espectacular bosque. En época de lluvias o en mojado habrá que tener cuidado ya que en algunos puntos el sendero casi va colgado del arroyo.

Finalmente el sendero desemboca en los molinos de agua de esta mañana. Cogemos la dirección de Rabanal de Arriba. Pero como ya dijimos al principio, y antes de terminar la larga jornada de hoy, nos desviaremos para ver la cascada del Pimpanón. Para lo cual cogemos a la izquierda, y en claro descenso, una senda bastante sinuosa y estrecha.

Después de unos10-15 min de camino llegamos a esta bonita cascada del Pimpanón. Es un lugar muy bonito y solitario.

Retomamos el camino, ganado los metros perdidos para ver la cascada, y ya regresamos para terminar la ruta.

Pasamos de nuevo por el Miro de Tejedo con el embalse de las Rozas justo antes de desembocar en Rabanal de Arriba. Fin de esta espectacular jornada por el Bierzo. Volveremos por estas fantásticas tierras.

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